Quien tiene el privilegio de poder elegir, tiene la responsabilidad de hacerlo.
Para tener un consumo crítico hay que tener dos cosas: conocimiento y ganas de vivir críticamente. Nuestros hábitos tienen impacto en el entorno. Nuestras neveras están llenas de impacto, nuestros armarios, nuestro ocio, nuestra movilidad, nuestro dinero en el banco… Muchas personas desean hacer cambios en este sentido, pero a veces resulta difícil saber por dónde empezar.
Saber, es poder. Si quieres conocer herramientas prácticas para que tus hábitos remen en la misma dirección que tú, este es tu taller.
Quien tiene el privilegio de poder elegir,
tiene la responsabilidad de hacerlo.
Taller con kit de herramientas!